viernes, 24 de julio de 2009

Una notable en la Historia: La Monja Eufrasia



En el año de 1814, Rosa Virginia Pelletier ingresó en la Orden de Nuestra Señora de la Caridad, en Tours, Francia, con el nombre de María de Santa Eufrasia. Ella se encargó del servicio directo a las jóvenes y mujeres. Fue superiora a los 29 años de edad y, por invitación del Obispo de Angers fundó una casa en esa ciudad, en 1829, y la llamó Buen Pastor.

Es una historia común… si no fuera por su making offf… Lo que no se cuenta públicamente es que la monja Eufrasia era todo menos la “monja tipo”. Pese a ser dulce y compasiva por naturaleza, contradecía la dirección autorizada de esa compasión, destinándola a las mujeres “sin honra ni virtud”, entre otras personas. Era bastante terca y tenía un fuerte carácter, se fugaba constantemente a prestar ayuda concreta y a recordar a estas personas no del todo amadas por la iglesia de entonces que ellos tbn eran “dignos y amand@s hij@s de Dios”. Amaba estudiar y alentaba a sus hermanas al estudio constante, sobre todo a las más jóvenes. Dentro de sus palabras posteriores (ya cuando estaba a cargo de la congregaación) están: “Hijas mías, nada hay más peligroso que la ignorancia; amad el saber”. Por estas razones era objeto de múltiples castigos y causa de muchos dolores de cabeza de sus superioras por aquél entonces….


Versión oficial: En 1831, la Hermana María Eufrasia estableció una comunidad contemplativa para las jóvenes y mujeres de su tiempo que quisieran consagrarse a Dios en su misión de reparación del mal de la sociedad y les dio como Patrona a Santa María Magdalena. Sus constituciones las aprobó el Obispo Montault, el 10 de enero de 1831…


Vamos a traducir: Las comunidades contemplativas son comunidades cerradas. Vamos, monjas de claustro. Esto no era muy afín con si idea de ir por ahí, arreglando, casi literalmente el mundo, digo esto por que años más tarde su forma de hacer generaría un verdadero ejército de mujeres que trabajarían por todo el mundo con su ideario en el corazón (bajo el brazo se puede caer, en el corazón está más seguro). Sufrió zancadillas por todos lados hasta que al fin, llevado el asunto ante el Papa de aquél entonces, escrito está en los libros de la congregación que el papa (u obispo, no recuerdo) dijo así: “Aquí hay claramente dos posibilidades: Usted es una santa o usted está loca. Vamos a ver que pasa si apostamos por lo primero…"


Entonces fue aprobado su Generalato en 1835. Con esta aprobación de la Iglesia, María Eufrasia instituyó la Casa de Angers y las casas dependientes de ésta, como una Congregación distinta de la "Orden de Nuestra Señora de la Caridad". La nueva Congregación recibió el nombre de Nuestra Señora de la Caridad del Buen Pastor de Angers y su orden fue apostólica, es decir de salida libre con el fin de evangelizar y prestar respaldo a, entre otros grupos: prostitutas para que quisieran dejar las calles, niñas huérfanas y mujeres encarceladas. Posteriormente, el 21 de julio de 1855, por mandato de la Santa Sede, la Congregación fue dividida en Provincias. A la muerte de María Eufrasia eran 110 casas alrededor del mundo.


Hay muchas cosas que dejan claro testimonio de la rebeldía constante de esta mujer. Por ejemplo cartas que dejan claramente establecido su fuga de las misas, ya cuando Superiora y Generala, y su marcado amor por la Justicia.
Más en el próximo capítulo....

1 comentario:

Anónimo dijo...

Nada menos que ¡Ciento diez Casas!

¡Vaya! A ver si el talantesoso Presi comisiona a tres mil tipos que copien la idea, y se reflota el crack inmobilirio y deconstruye el temible paro.

Me ha gustado, mucho, esa disyuntiva de: "Loca o Santa"

Lo cierto es que yo jamas sabria resolverla.

Saludos, admirada. Que grato sentirte de nuevo.

Carlos I de casa y tal cual de España.